Los santuarios están abiertos al público desde finales de noviembre. En diciembre y enero, las mariposas permanecen casi inmóviles en los árboles, ya en febrero y marzo el espectáculo es maravilloso: miles de mariposas vuelan y el aleteo produce un sonido único.
Es justamente a partir de este mes de febrero que las mariposas en los santuarios ‘despiertan’. Llegan en noviembre, después de recorrer unos 5 mil kilómetros desde Canadá buscando mejores condiciones para su reproducción; durante diciembre y enero permanecen inmóviles en las ramas y troncos de los oyameles, a modo de hibernación. Y es en febrero y marzo cuando adquieren la madurez reproductiva, y se lanzan en vuelos multitudinarios que le ofrecen un espectáculo increíble a los visitantes.
México es hogar de la Reserva de la Biósfera Mariposa Monarca en los estados de México y Michoacán. En total son seis santuarios ubicados en los municipios de Ocampo, Angangueo, Zitácuaro y Contepec, en Michoacán, y Donato Guerra, Villa de Allende y Temascalcingo, en el Estado de México.
Los santuarios de la Monarca están considerados entre las cuatro bellezas naturales reconocidas por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad en suelo nacional. Los más cercanos a la Ciudad de México son los del Estado de México: El Capulín, Piedra Herrada y La Mesa; un poco más lejos de la capital, en Michoacán, se encuentran El Rosario, Senguio y el Centro de Cultura para la Conservación Sierra Chincua.
Los santuarios cuentan con paraderos turísticos y guías experimentados para recorrerlos, además de sanitarios, venta de comida, artesanías y, en algunos casos, caballos o bicicletas para recorrer los alrededores y hasta deportes extremos.
Estado de México
En El Capulín, por ejemplo, hay una pequeña posada familiar con cinco habitaciones, y comidas incluidas donde pueden pasar la noche, o cabañas para hospedarse.
Piedra Herrada está en las faldas del Nevado de Toluca; para llegar hasta ahí hay que hacerlo a pie o a caballo pues no hay acceso a coches en esta área. El recorrido es de unos 25 minutos caminando.
La Mesa cuenta con restaurantes, miradores, cabañas para hospedarse y renta de caballos para recorrer la zona.
Michoacán
El santuario de El Rosario está considerado como el más grande del mundo; se calcula que recibe a la mitad de las mariposas que llegan desde Canadá. Cada año alberga alrededor de 140 mil visitantes.
El santuario de Chincua está en el pequeño pueblo minero de Angangeo, donde además del Centro de Estudios sobre la Mariposa Monarca está El Salto, una cascada de 10 metros de altura.
Senguio se localiza a unos 200 kilómetros de la Ciudad de México. Cuenta con un área para acampar, renta de bicicletas y de caballos, tirolesa, restaurante de cocina típica, y una tienda de recuerdos y artesanías.
La entrada a cualquiera de los santuarios tiene un costo de alrededor de 35 pesos por persona y están abiertos de 9 de la mañana a 7 de la noche, hasta el 31 de marzo.